TRASTORNOS DEL SUEÑO

Las personas mayores tienen trastornos del sueño y no duermen lo suficiente. Esto les puede acarrear problemas de salud graves como la obesidad, enfermedad cardiovascular y la diabetes, según un informe de la American Academy of Sleep Medicine.

El sueño nos permite que nuestro cuerpo descanse y se restablezcan los niveles de energía necesarios. Si no descansamos, nos volvemos irritables y somos más propensos a sufrir cualquier tipo de accidente. Al igual que la comida o la bebida, el sueño adecuado es esencial para tener una buena salud y calidad de vida.

Siempre he oído decir que las personas mayores necesitan dormir menos y ésto no es del todo cierto. Las personas mayores necesitan la misma cantidad de sueño que los adultos más jóvenes, entre 7 y 9 horas (los niños y adolescentes sí necesitan dormir más que los adultos). Lo que ocurre es que su capacidad para conciliar el sueño no es la misma. Tienen un sueño más ligero y luego se pasan el día dando cabezadas.

Las personas mayores se enfrentan a dificultades para dormir debido a los cambios en su entorno, como es el ruido, su reloj biológico y los medicamentos que toman para tratar sus enfermedades.

Existen distintas explicaciones a estos cambios entre ellas que las personas mayores producen y segregan menos melatonina, la hormona que promueve el sueño.

Para poder dormir mejor se recomienda seguir las siguientes pautas:

- Procurar irse a la cama y levantarse por la mañana todos los días a la misma hora.
- Evitar siestas prolongadas durante el día. Deberíamos establecer una siesta cuya duración no exceda de los 20 minutos.
- Evitar tomar alimentos o bebidas que puedan alterar el sueño como la cafeína y el alcohol.
- Si nos gusta la lectura, podemos dedicarle unos minutos antes de dormirnos.
- Practicar ejercicios moderados durante el día.
- Un baño antes de acostarnos también puede ser un buen relajante.
- La habitación debe estar bien ventilada y con poca luz.

y sobre todo, dejar los problemas y el stress aparcados antes de irnos a dormir.
Otra cosa que debemos tener en cuenta es que cuando no podamos conciliar el sueño, es preferible que nos levantemos de la cama y hagamos cualquier otra actividad hasta que nos rinda el sueño. Hay personas que prefieren oír la radio mientras intentan dormir.

Fuentes: American Academy of Sleep Medicine.
U.S. National Institute on Aging.

PRODUCTOS IMPORTANTES PARA NUESTRA DIETA: Semillas de Sésamo

En este apartado de alimentos sanos, quiero hablaros de las semillas de sésamo.

Estas semillas tienen un alto valor nutricional. Dicen que contienen más calcio que la leche. Una ración de 25 g. de sésamo aporta el 30% de las necesidades de calcio diarias. Contienen proteínas, grasas insaturadas, hierro, zinc, fósforo, magnesio, cobre y cromo, lo que hace que sean un complemento mineralizante. También contienen vitaminas del grupo B y E.

Yo las suelo comprar crudas pero si quieres mejorar su sabor puedes tostarlas en una sartén. ¿Cómo utilizarlas? Pues, puedes enriquecer los alimentos aplicándolas a ensaladas, yogures, cremas de verduras e incluso espolvoreandolas sobre el pescado.

Debido a su contenido en grasas insaturadas es un buen remedio para controlar el colesterol. Por su gran aporte en calcio, es aconsejable durante el embarazo y la menopausia, sobre todo para combatir la osteoporosis. Su aporte en hierro es recomendable en periodos de anemias. Previene la infertilidad masculina por su contenido en zinc. Su contenido en lecitina es superior al de la soja y eso hace que sea adecuado para reducir y controlar los niveles de colesterol.

También tienen un alto contenido en fibras y por tanto, ayuda a facilitar la evacuación en casos de estreñimiento.

Este fin de semana he probado una receta de cocina en la que uno de los ingredientes principales son las semillas de sésamo. Si queréis probarla, os la recomiendo, es muy fácil.

Ingredientes: (para dos personas)

2 pechugas de pollo cortadas en tiras.

una clara de huevo

Ralladura y zumo de un limón

semillas de sésamo

1 cebolla cortada a tiras,

Azúcar de demerara (yo he utilizado azúcar morena)

Se bate la clara de huevo a punto de nieve. Se pasan los trozos de pollo, una vez sazonados con sal por el huevo y se empanan con las semillas de sésamo.

En un wok, con un poco de aceite de oliva, se rehoga la cebolla hasta que esté tierna y dorada. A continuación se fríen los trozos de pollo en una sartén aparte. En un bol, se mezclan el azúcar, el zumo y la ralladura de limón. Se añade esta mezcla a la cebolla y se deja hervir unos minutos.

Se sirven acompañado de arroz blanco.

Yo el pollo y la salsa la serví por separado pero si quieres, unos minutos antes de servirlos puedes mezclarlos en el Wok.

¡BUEN PROVECHO!

BEBER CON MODERACION ES BUENO

El "Journal of the American Geriatics Society" ha publicado un estudio donde indica que beber con moderación es bueno para el cerebro femenino.

Realizado un muestreo de entre 3000 mujeres de 70 a 82 años, que tomaban entre una y siete copas de alcohol por semana, tras un seguimiento de unos 3 años, se demostró que éstas tenían una función cognitiva de mejor calidad que las que no bebían.

El Dr. Stott de la Universidad de Glasgow dijo a Reuters Health que "la proporción de los efectos era equivalente a la de varios años de envejecimiento". Destacó que los resultados son coincidentes con otros estudios previos en los que se demuestra que beber moderadamente es bueno para el cerebro que envejece.

Ahora bien, hay que beber con moderación. Si se toma alcohol en exceso es malo tanto para la memoria como para el cerebro.

En este estudio se evaluó los efectos del consumo de alcohol sobre la función cognitiva en un número determinado de personas mayores participantes en una prueba clínica para evaluar un tipo de fármacos "estartinas" para reducir el colesterol.

Entre los hombres que participaban en este estudio, no se observaron diferencias en la función cognitiva al inicio del estudio, entre los que bebían y los que no lo hacían.

Pero sí se pudo constatar una diferencia apreciable entre las mujeres que bebían alcohol moderadamente y las que no bebían. Las pruebas realizadas demostraron resultados más altos en la velocidad para procesar información y la memoria verbal.

El equipo también tuvo en cuenta el nivel educativo de las participantes, si eran fumadoras o no, el índice de masa corporal y los antecedentes de enfermedad vascular, factores asociados con la función cognitiva y el consumo de alcohol.

Entre las explicaciones que dieron para que exista esta diferencia de género en el efecto del alcohol sobre la función cognitiva, el Dr. Stott señaló que las mujeres tenían niveles más altos de estrógenos, lo que podría protegerles el cerebro.

¡¡¡S A L U D!!!

Fuente: Journal of the American Geriatics Society.

Reuters Health Information Medline Plus